Carlos de Jacoba es un joven guitarrista, intérprete y compositor nacido en Motril (provincia de Granada, España) en el seno de una familia gitana. En su estilo convergen tradición, conocimiento y pasión por el toque más gitano, con modernidad, frescura y romanticismo, influenciado por grandes maestros como Camarón y Paco de Lucía.
Mayor de dos hermanos, su infancia transcurrió en un ambiente completamente flamenco. Fue su padre, gran aficionado al cante flamenco puro, quien le transmitió desde muy temprano la pasión por este arte. Sin embargo, fue en las calles de su barrio, Huerta Carrasco, donde se enamoró del sonido de la guitarra. Estos primeros años dejaron una marca indeleble en su forma de entender y abordar el flamenco.
A los 11 años recibió su primera guitarra y comenzó a tomar clases con Manuel Carvajal Ramos, quien de inmediato reconoció en su alumno cualidades extraordinarias. Poco después, conoció a quien sería su maestro, Eugenio Bermúdez, con quien desarrolló su personalidad artística, así como la sensibilidad y la intuición necesarias para acompañar al cante.
Obtuvo su primer contrato a los 16 años, realizando una gira por los Países Bajos con otros músicos andaluces. Poco después, la familia se estableció en la ciudad de Algeciras (Cádiz). Su interés artístico lo llevó entonces a Madrid, donde tanto la elegancia y técnica de su interpretación como su personalidad no pasaron desapercibidas, y se introdujo en el ambiente flamenco más vanguardista, en contacto con músicos reconocidos como El Piraña, El Paquete, Juan Antonio Salazar y el renombrado cantaor Diego el Cigala, a quien acompañó en la gira del álbum «Picasso en mis ojos».
Desde entonces, los tablaos, peñas y teatros se convirtieron en su terreno de juego, siendo solicitado por los grandes cantaores del momento como Estrella Morente, Guadiana, Duquende y Rancapino, entre otros, así como por destacadas figuras del baile como Antonio Canales o Farruquito.
En 2014, su madurez lo llevó a producir, junto a Lucky Losada, el primer álbum de su hermano David de Jacoba (quien fue el cantaor durante los últimos años del maestro Paco de Lucía). «Jubileo» fue reconocido como el mejor álbum revelación de cante flamenco.
Inquieto investigador de nuevos horizontes sonoros, Carlos de Jacoba se ha dejado seducir por otros tipos de música como el jazz o el tango, colaborando con artistas de renombre internacional como Larry Coryell, Alain Pérez, Jerry González o Bobby McFerrin.
En 2018, fue seleccionado por el músico y compositor Diego Amador para formar parte del espectáculo «Camarón, sueños de un niño eterno». Este fue un momento crucial en su vida artística y personal, estableciendo una estrecha relación con el gran pianista sevillano y el guitarrista madrileño Jesús de Rosario. Ambos músicos ejercieron una notable influencia en la evolución musical y artística de Carlos de Jacoba, que se reflejará en su primer disco lanzado al año siguiente.
Carlos de Jacoba es un artista en constante búsqueda de su propio duende para trascender los límites de su arte. Hoy en día, tanto en Madrid como en Andalucía, aficionados y conocedores acuden en gran número a todos sus conciertos.